La limpieza facial natural es algo sencillo que además de cuidar de nuestra piel cuida del medio ambiente, algo imperiosamente necesario en los momentos que estamos viviendo.
Como ya sabes pasé una larga temporada estudiando los productos «naturales» que nos venden. La maravillosa propaganda hipnótica en la que pretenden hacernos creer, es que usándolos vamos a volver a tener la piel como cuando teníamos 25 años…
Nuestro cuerpo siempre se está regenerando
El ser humano va cambiando su estructura tanto interna como externa cada cierto tiempo. Las células se regeneran, las de la epidermis aproximadamente entre 10 y 30 días. Es por eso que miras fotos de hace 10 años y te ves diferente, aunque la belleza si surge de dentro serás bella siempre, pero nunca volverás a tener la piel como cuando tenías 25 y la verdad es que ni falta que hace.
Dicho esto, lo que te cuentan en la propaganda es más bien una falacia, pero puedes creer en ella o tomar las riendas y descubrir nuevas opciones de verdad sanas y que además resultan evidentes en muy pocos días.
Limpieza facial casera
La limpieza facial natural casera es tan sencilla y los resultados tan increíbles que te sorprenderás. Para esta primera fórmula solo necesitas unas cuantas cositas muy fáciles de conseguir y mucho más fáciles de mezclar.
A continuación te revelo el secreto
- Arcilla blanca y o verde.
- Una cucharada de Aceite de argán.
- Hidrolato de romero.
- 10 gotas de Aceite Esencial de romero o ylang ylang.
- Una cuchara de madera.
- Un recipiente para hacer y guardar la mezcla.
- Una esponja.
- Un palito de madera para remover.
¿Porqué arcilla?
Además de las muchas propiedades de la arcilla de las que hablaremos más adelante, la arcilla tiene la cualidad de absorber la suciedad y el sebo.
El hecho de usar cuchara y palito de madera para mezclar la fórmula es porque la arcilla puede recoger los metales pesados de nuestras cucharas que suelen estar fabricadas de níquel, cromo y acero, eso no conviene a nuestra piel.
Si tienes la piel muy seca y sensible, usa arcilla blanca, si la tienes mixta puedes usar arcilla blanca y añadir una proporción más pequeña de arcilla verde, si tu piel es grasa la proporción de arcilla verde puede ser mayor que la de arcilla blanca.
Entrando a formular
En el recipiente que hayas elegido ( yo suelo reciclar recipientes antiguos) con la cuchara de madera pon varias cucharadas, hasta casi llenar el recipiente.
A continuación añade tu cucharada de aceite de argán y remueve con el palito de madera.
Después añade el hidrolato de romero y remueve, la mezcla debe quedarte con una consistencia pastosa, como crema, pues la vas a poner en tu cara y cuello (también en las manos y en el pecho si así lo deseas).
Finalmente añade las 10 gotas del Aceite esencial que hayas elegido, te he indicado dos, romero o ylang ylang, ambos son muy buenos para piel, también son muy buenos el de caléndula o mirra, eso ya lo decides tú.
Y ya tenemos la magia en nuestras manos
Ya tienes tu jabón de arcilla que limpia profundamente tu piel, aclara las manchas, regula el sebo, y sin necesidad de peeling arrastra las células muertas de tu piel y la vez que te limpia nutre e hidrata tu piel gracias al aceite argán, al hidrolato y a los Aceites Esenciales.
Como usarlo
Extiédelo sobre la piel de tu rostro cuello y si quieres llega hasta el pecho que es una zona de piel muy sensible y también muy necesitada, yo lo hago y también lo pongo en el dorso de las manos.
Deja que se seque y una vez seco, humedece la esponja en agua y retíralo con suavidad.
Una vez limpia la piel puedes pulverizar el hidrolato de romero como tónico facial.
Y ya puedes usar tu crema natural.
Puedes utilizar esta mezcla también como mascarilla usando más cantidad y dejándola más tiempo en la cara ¡como ves es multiusos!